NOTICIAS

AÑO JUBILAR CON INDULGENCIA PLENARIA AL VISITAR A LA REINA DE LAS MARISMAS, LA VIRGEN DEL ROCIO.

El obispo de Huelva anunció, el pasado 27 de mayo, la concesión de Benedicto XVI, otro Papa que queda para la historia del Rocío

FECHA: 01-06-2012
abcdesevilla.es (28MAY12)
Si hay un siglo de especial trascendencia para la multisecular devoción a la Virgen del Rocío, antaño con la advocación de las Rocinas, ése es el siglo XX, una centuria en la que se desarrollaron acontecimientos de singular relevancia histórica —la coronación canónica en 1919 y la visita papal de Juan Pablo II en 1993, entre otros— en torno al fervor de una devoción mariana que pasó de tener un carácter local o comarcal a universal. Esa universalidad de la devoción a Nuestra Señora del Rocío ha quedado reforzada aún más con la concesión por parte de Benedicto XVI —otro papa para la historia rociera— del Año Jubilar al Rocío con indulgencia plenaria.

El anuncio de esta gracia pontificia fue realizado por el ordinario de la Diócesis de Huelva, monseñor José Vilaplana, en el transcurso de la misa pontifical del domingo de Pentecostés en el Real del Rocío, donde participó como concelebrante entre otros el cardenal arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach. Antes de la bendición final, monseñor Vilaplana se convirtió en heraldo de tan grata nueva para toda la gran familia rociera que ya se integra en 111 hermandades, con la Matriz de Almonte y todas las que peregrinan hasta la aldea, que lo hacen no sólo por Pentecostés sino a lo largo de todo el año.

La concesión del Año Jubilar por parte de Benedicto XVI responde a una petición formulada por el párroco de la Asunción de Almonte, José García, y el presidente de la Hermandad Matriz, Juan Ignacio Reales, con ocasión de efeméride tan señalada como el bicentenario de la proclamación del voto perpetuo de acción de gracias a la Santísima Virgen, 19 de agosto de 1813, que dio origen al Rocío Chico. Con este voto, Almonte dio las gracias a su Patrona por proteger a la población de una destrucción segura en 1810 a manos de los invasores gabachos durante la Guerra de la Independencia. El presidente de la Matriz expresó ayer su gran satisfación: «Hemos de concretar aún qué actos se desarollarán en el Año Jubilar, en el que El Rocío y Almonte serán el centro del catolicismo en España.»

El Año Jubilar comenzará el 15 de agosto, solemnidad de la Asunción de la Virgen, y finalizará el 7 de septiembre de 2013, vísperas de la festividad de la Natividad de María, y en él alcanzarán indulgencia plenaria todas las personas que oren y mediten ante la Virgen en su advocación del Rocío, cumpliendo las condiciones exigidas, confesar, comulgar y orar por las intenciones del Santo Padre. Los beneficios de la concesión papal se extienden a todos los enfermos que su estado les impida desplazarse hasta donde se halle la imagen de la Señora para participar en las celebraciones jubilares siempre que ofrezcan su dolor. El decreto de concesión insta a los sacerdotes a recibir muchas confesiones en el santuario, al que el Vaticano dará categoría de internacional, y llevar la comunión a los enfermos.

El Año Jubilar, previo al tiempo de gracia dedicado por Su Santidad a la nueva evangelización y que coincidirá también con el bicentenario de la Hermandad de Triana, abarcará toda la estancia de la Virgen del Rocío en Almonte. Una vez finalizados los cultos del Rocío Chico en el santuario, la Señora estará en el pueblo el día 20 de agosto próximo, cinco después del inicio del jubileo, cumpliéndose así con la tradición de cada siete años. La Señora permanecerá en la parroquia de la Asunción almonteña hasta el 12 de mayo de 2013, domingo de la Ascensión del Señor y anterior a Pentecostés, cuando se irá de nuevo a su santuario de las marismas para bendecir a los romeros en un nuevo y esplendoroso Rocío.

LAS CLAVES
Concesión del Papa. El Romano Pontífice concede un año jubilar mariano para que se pueda ganar la indulgencia plenaria ante la imagen de la Virgen del Rocío. El año jubilar comenzará el 15 de agosto próximo, coincidiendo con la festividad de la Asunción de Nuestra Señora y terminará el 7 de septiembre de 2013, víspera de la Natividad de María Santísima.
Un otorgamiento extraordinario. El año jubilar o santo es un tiempo que la Iglesia Católica concede singulares gracias (la indulgencia plenaria) a los fieles y hasta ahora, en España, se han celebrado en Santiago de Compostela, Liébana (Cantabria), Utrera, Santo Domingo de la Calzada (La Rioja) y Canjáyar (Almería).
Condiciones para la indulgencia. La indulgencia plenaria es una gracia por la que se saldan las penas temporales de los pecados. Para obtenerla hay que confesarse, comulgar, rezar por el Papa y, en este caso, orar ante la imagen de la Virgen del Rocío.

AÑO JUBILAR CON INDULGENCIA PLENARIA AL VISITAR A LA REINA DE LAS MARISMAS, LA VIRGEN DEL ROCIO.

TITULARES